La cola del zorro

El zorro Matías vivía en Puerto Madryn, en el campo.
Ya se sabe que el zorro en el campo representa la picardía.
Un día, este animalito andaba con un hambre tremendo, y vio un corral de gallinas en una casita rodeada de alambres muy finos.
El zorro no sabía cómo ingeniárselas para subir por ese alambre tan alto y poder darse una panzada de gallinas.
Miró para todos lados y observó su cola llena de pelos.
Fue en ese instante que se le ocurrió una gran idea. Usaría su cola como carnada.
Juntó del suelo una lombriz rosada y pastos secos, pero firmes. Después con mucho cuidado ató al gusano con los pastos a su cola y como si fuera una caña de pescar, la revoleó con tanta suerte, que cayó al lado de la gallina más rechoncha.
Sorprendida la gallina comenzó a seguir al gusano más rápido que había visto en su vida.
El zorro corrió a un bosque con la gallina detrás, miró a su alrededor, y cuando nadie lo miraba, se la comió.


Candela Tisera

Taller Literario Municipal "Lápices Inquietos"
Libro "Para no molestar a la siesta"
Puerto Madryn 2008

Los fantasmas jugando a la mancha

Había una vez un castillo embrujado que era de madera y ladrillos. Allí vivían diez mil fantasmas que siempre jugaban a la mancha.
El castillo tenía murciélagos y vampiros.
“La mancha” era el fantasma más chiquito que nunca quería manchar a nadie por eso siempre perdía en el juego.
Algunos, a veces se escondían detrás de las ventanas, diciendo: “¡A MÍ NO!”.
Y los otros les hacían: “BLU BLA BLO, como diciendo: ¡Acá estoy y no me ves!”
Al final, cuando terminaba el juego se ponían a hacer piedra, papel y tijera.
Siempre se ve en el castillo embrujado a los diez mil fantasmas que están jugando a la mancha.


Dulce Espínola (8 años)

Taller Literario Municipal "Lápices Inquietos"

Libro "Para no molestar a la siesta"

Puerto Madryn 2008

Las ciudades - Poesía

Puerto Madryn es muy lindo,
Trelew no me gusta tanto,
Rawson es bastante chico
y Dolavon otro tanto.

A Comodoro Rivadavia
me gustaría ir a pasear
conocer sus montañas
y poderlas escalar.

Caleta y Deseado
no me simpatizaron tanto
fui justo en invierno
y estaba nevando.

Alejandro Cañiú

Taller Literario Municipal "Lápices Inquietos"
Libro "Para no molestar a la siesta"
Puerto Madryn 2008

Me das - Poesía

Me das la luna
me das el sol
me das las estrellas
de tu corazón.
Me das una luz
que me ilumina
cuando me miras
y en tus ojos veo lágrimas
que se confunden
con las mías.


Ana Bertolino

Taller Literario Municipal "Lápices Inquietos"
Libro "Para no molestar a la siesta"
Puerto Madryn 2008

Abuelas

Las abuelas son bastante molestas, como la abuelita de Pepa, mi mejor amiga, que siempre le pide que le limpie la dentadura, que le cambie de canal y hasta le suele pedir que la acompañe al baño.
La mía a comparación de la de ella, no es para nada molesta.
No es molesta pero es bastante gorda, orejuda, peluda y con las uñas que le llegan hasta el suelo. Yo siempre le digo:
-¡Abuela cortáte las uñas! Y ella me responde siempre la misma respuesta:
-¿Querés que te cuente un cuento de brujas?
Y yo le tengo que decir que sí, porque sino se larga a llorar y dice que no la quiero. En otras palabras hace un berrinche y me empieza a contar el cuento con el mismo principio: “Las brujas como los brujos eran muy buenos…”, pero en la mitad de la historia se queda dormida.
Y bueno, así es mi abuela.


Martina Azurro

Taller Literario Municipal "Lápices Inquietos"
Libro "Para no molestar a la siesta"
Puerto Madryn 2008

Amor cochino

Había una vez una cerdita muy hermosa y soñadora llamada Jacinta. Su sueño más grande era conocer a un príncipe de lodo (no príncipe azul).
Ella soñaba que al llegar ese día al mirarse saldrían chispas.
Un día mientras chapoteaba en el barro Jacinta vio pasar a Morosco, un chanco del barrio. Jacinta se acercó y charlaron varias horas. Así pasaron los días y cada vez fueron más amigos.
Una tarde de verano, Morosco le preguntó si quería ser su novia, obviamente ella le dijo que sí.
Morosco y Jacinta fueron novios por tres años y un día de primavera él le preguntó si quería que se casaran.
Se casaron y fueron en camioneta a vivir a Barrolandia.


Juana Caló

Taller Literario Municipal "Lápices Inquietos"
Libro "Para no molestar a la siesta"
Puerto Madryn 2008

¡Qué olor! - Poesía

El emperador
era un roedor

que brillaba
por su esplendor
y cumplía con su labor.

Él tenía mucho valor
hasta que un día
por su olor.

no pudo continuar
como trabajador.

Pobre emperador
hubo que regalarle
un jabón.


Juana Caló


Taller Literario Municipal "Lápices Inquietos"
Libro "Para no molestar a la siesta"
Puerto Madryn 2008

Cayetano

Me llamo Cayetano y aquel día comencé a trabajar como remisero.
“Tu primer trabajo “Caye”, San Martín 2153”, me avisó la telefonista.
Estos últimos quince días me los había pasado estudiando la guía de la ciudad. Fui a la casa. Me esperaba una chica vestida como una princesa. “Echeverría 1231. ¡Rápido, el baile está por comenzar!”, dijo.
Era el baile de la semana, iba a estar muy lindo.
A la chica mientras bailaba se le salió un zapato y todos lo pateaban.
Cayetano hizo parar el baile y dijo: “¡Eh, ustedes dejen de patear ese zapato!”.
La chica vestida como una princesa fue a buscar su zapato y a bailar con Cayetano.


Francisco Franceschi

Taller Literario Municipal "Lápices Inquietos"
Libro "Para no molestar a la siesta"
Puerto Madryn 2008

Amor a primera vista - Poesía

Mis ojos se humedecen
y cuando te veo con ese vestido
me hago líquido humano.
¡Qué linda estás!
Tus ojos son flores
tu pelo es fragancia
para la naturaleza
y para mí también.


Facundo Franceschi

Taller Literario Municipal "Lápices Inquietos"
Libro "Para no molestar a la siesta"
Puerto Madryn 2008

Libro "Para no molestar a la siesta" 2008 - TALLER LITERARIO DE CHICOS DE 3ro A 6to. AÑO EGB2.

Las imágenes y los textos sólo podrán copiarse citando la fuente.

Por respeto a los niños que son los autores de los mismos.

Libro del Taller Literario Municipal de Puerto Madryn- 2008